BITÁCORA 2009-2013

Memoria gráfica es un proyecto en proceso que recicla, produce y circula memoria visual de espacios geográficos significantes, a través de dinámicas de investigación, archivo, recopilación y registro fotográfico, que ponen a prueba las consideraciones de memoria al trabajar bajo la dinámica cotidiana, vivencial y popular de la identidad.

Archivo memoria gráfica

2.10.09

La fotografía popular (¿quién no posó alguna vez?)

Se puede encontrar a lo largo de la provincia de Bolívar pequeños estudios fotográficos comerciales que ofrecen los servicios tradicionales como retratos en distintos formatos, cobertura de eventos particulares, etc. Aunque son muy pocos y repartidos por todas las ciudades, la pequeñez de las ciudades hace que se encuentren cercanos unos a otros, ofertando sus promociones y formatos en las paredes exteriores de los locales, en cajas fabricadas para exhibir fotografías donde se puede observar las imágenes de antiguos clientes que han quedado inmortalizados en los escaparates, una especie de exhibición pública que atrae la mirada de curiosos y posibles clientes. Seguramente los parámetros de elección de los que formarán parte en la vitrina de muestra estarán regidos por el canon de belleza vigente en el lugar. Posiblemente, esta práctica de exposición haga que nos sintamos más cercanos a nosotros mismos, al identificar y reconocer en los rituales compartidos y comúnmente retratados, una huella de lo que nos asemeja como individuos.
Los estudios que se dedican a estas prácticas fotográficas son muy pocos, y más bien escasos los que se pueden considerar tradicionales. La mayoría de estos locales son modernos, y claro, la fotografía se realiza digitalmente; las cámaras manuales son un objeto que se vende como reliquia, y son pocos los negativos que han sobrevivido a la tecnología. Pero a pesar de todo esto, los fotógrafos más antiguos conservan en sus manos verdaderos archivos de las ciudades y de los que son y alguna vez estuvieron. Sin lugar a dudas, los estudios fotográficos son los sitios donde se puede encontrar gran parte de la memoria retratada de las ciudades.
La particularidad de estos estudios es que por el hecho de estar ubicados en ciudades pequeñas concentran gran cantidad de archivos en retratos de la comunidad (que es el servicio que más caracteriza a los estudios fotográficos y que goza de mayor popularidad entre los clientes) convirtiendo a estos estudios en uno de los más grandes archivos contemporáneos que podrían evidenciar la transformación y servir de retratos contemporáneos de la población de una ciudad, después de todo, quién no posó alguna vez para una foto tamaño carnet, o pasaporte, para la licencia, o para el ingreso al colegio con sus respectivas fotos, o cuando nuestras mamás contrataron a un fotógrafo para que nos tomara fotos haciendo el ridículo en algún evento escolar?. Es posible que el negativo del que alguna vez fuimos fantasmas ya no exista, o tal vez sí.
El fácil acceso a la tecnología doméstica como cámaras digitales y video caseras hace que cada vez la gente acuda menos a los estudios fotográficos, sin embargo, estos negocios, aunque no todos, han encontrado en la oferta de otros servicios la oportunidad para seguir viviendo, combinando el estudio fotográfico con servicios de internet, venta de cámaras digitales, celulares y accesorios, etc., convirtiendo los locales tradicionales en algo más moderno y atrayente al público, pero conservando en sus paredes pequeños rastros de historias pasadas.